20.11.08

Bancos




Tras leer fantásticos artículos sobre la crisis —los mejores, uno de Vicent Soler en Levante-EMV que linké aquí mismo y otro, la editorial de J. V. Miralles del Lletraferit núm. 88— es difícil dejar de señalar con el dedo a los culpables principales de la actual situación: especuladores, bancarios… y políticos que los han tratado como amantes consentidos.

Esto no pretende ser más que una aproximación tangencial a la crisis, que sufrimos casi todos y de la que ellos ya han sacado provecho. ¿Están las cosas aún peor de lo que deberían estar? Sí, tajantemente, porque la banca y los especuladores han frenado en seco el consumo (incluso el que no es frívolo y desmanotado). ¿Y por qué? Seguro que para sacar aún más. No hay otra brújula que les guíe sino la codicia y la avaricia.

Después de años sin pedir avales a los desalmados que han sepultado de ladrillos nuestra costa (por ejemplo), ahora resulta que para comprar un cortauñas, los bancos reclaman que les hagas un informe de los calzoncillos que has usado durante los últimos diez años. Tú pagas tus impuestos, no estás en listas negras, no debes lo que te calza cada mañana… y sin embargo, te tratan como si fueras uno de los amiguitos estafadores con que se reían tan sólo hace unos meses.

Ellos están haciendo está situación más dramática de lo que podría ser. El siguiente paso debería ser aullar por las calles el porqué y señalarlos con el dedo hasta sacarles los ojos.

Se limpian el culo con el sudor de nuestras frentes.

Y sin embargo parece que no tengamos más obsesión que despertar de esta pesadilla para que las cosas vuelvan a ser como antes.

Aún nos pasa poco.

10 commenti:

diafebus ha detto...

Sume a esta situación la imbecilidad de quienes se endeudaron por el 60% de sus ingresos (y no me vale la patraña de que les engañaron, no me vale que el ambiente conducía a ello, cada uno debe ser responsable de su propia estupidez, lo otro es adolescencia perpetua) y la histeria colectiva y tendrá un cóctel molotov de proporciones universales. ¿Recuerdan el conato de huelga de transportistas? ¿Recuerdan como personas aparentemente razonables se condujeron como refugiados somalíes? ¿Recuerdan como se puso en jaque el suministro de productos básicos? Pues bien, la situación es mala, pero nuestra actitud de ratitas temblorosas la empeora exponencialmente. La culpa es de los bancos, de los especuladores, de los poderosos de la tierra y hasta de la guardia suiza, pero la famélica legión tampoco ha estado muy lista que digamos. ¿Aprenderemos para la próxima? No.

diafebus ha detto...

Ah, por cierto, otro problema estructural es el de las recetas que la gente, de modo individual, trata de aplicar. Empeñarse en vivir conforme a patrones que se han demostrado obsoletos es un lento suicidio. Si cambia la situación deben cambiar las armas con que se enfrenta. El "yo me quedo como estoy y rezo para que todo pase y vuelva todo a estar como antes" no vale. Nada volverá a ser como antes, al menos no exactamente. El gato escaldado, hasta del agua fría huye.

morena ha detto...

De acuerdo que cada uno debe ser consciente de donde narices se mete, pero el problema es que no todo el mundo es consciente de lo que significa hacerse novio de un banco y eso no es culpa sino desconocimiento, es cierto que la crisis social es casi más grave que la propia crisis económica pero de eso ya se están encargando cierto sector de la sociedad, alertar, asustar, acojonar y angustiar, es la misma película de siempre, a ellos está claro que les interesa, lo tienen a huevos, no hay dinero, se abarata todo y sacan partido. La crisis no aparece de repente, es el resultado de la gestión de años anteriores, y esa burbuja la crearon ellos, y los que engañaron con dinero fácil fueron ellos, y los que convencieron a los inmigrantes de lo megaguai que era España fueron ellos, siempre son ellos. Los inmigrantes son realmente quienes están pagando las consecuencias, fueron los primeros contratados por los destructores, para el trabajo sucio y por lo tanto los primeros en caer.

Asco, rabia e impotencia

Anonimo ha detto...

Esto era previsible desde hace años. A mi no me ha sorprendido lo más mínimo. Yo ni siquiera tengo tarjeta de crédito. Que les den por el culo. Y encima me he vuelto ciclista otra vez.

bar Torino

Comtessa d´Angeville ha detto...

estic com Bar Torino, ja no tinc targeta però els meus motius són ben diferents i tenen poc que vore amb la crisi,

a mi la crisi me té un poc igual, li ho deia a algú l'altre dia, que sempre m'ha costat el mateix arribar a final de mes, ne guanyara 600 o 3.000

¡LLUEVE REVOLUCIÓN! ha detto...

El problema es que entre los informativos, los bancos, la Bolsa...han metido tanto pánico a la gente de la calle en el cuerpo que parece que se vaya a acabar el mundo, como pasó con el rollo del petróleo, se acuerdan? la gente está sacando dinero de los bancos como locos, comprando en los mercados como si no hubiera un mañana pero sólo lo más barato, se han dejado de caprichos aún siendo ínfimos...cuando lo que hay que hacer es GASTAAAAAAAAAAAAAAAAR!!!!para que se dispare de nuevo el PIB, el IVEX y todas esas siglas que no tengo ni idea de lo que son, pero que lo mismo da!!!!!gasten, gasten, como si no hubiera un mañana!!!!!!!!!si gastamos se irá restableciendo todo.
Vale, es la humilde opinión de uan historiadora del arte que no tiene ni idea del tema, pero a qué mi pronóstico les gusta más, tan feliz y esperanzador?jajajaja!
Y, de momento, no he notado mucho la crisis, me ha pasado casi al revés que a todo el mundo ahorita en el mundo laboral, tampoco estoy emtida en hipotecas y no gasto en gasolina...sí, vivo en un mundo POP, de fantasía y colorrrrrrr....
Saludos POP, felip finde!jajaja!Les mando a todos un beso pegadito a un billete de 100 euros, a gastar he dicho!jaja!

morena ha detto...

ups, jajajajaja, felip a ti tb

Vicè ha detto...

Ja ho vaig dir a ca Nota. Lo pitjor, la gran hòstia, estava per vindre...

Anonimo ha detto...

El otro día encontré una viñetita del Roto que ejemplificaba muy bien lo que pasa. Salía un tío, con cara de deprimido, que decía: "Nos anestisian con la crisis antes de despedirnos."
Esto es una gran jugada: Miedo primero, luego realidad, y mientras tanto, muchas cumbres, muchos rescates financieros, que los que ganaban dinero seguirán velando por su bolsillo. Y que al sacrosanto mercado no lo toque ni Dios, (por mucho que le pese a Rouco es la nueva religión de los suyos).
Y por último, lo más escandaloso, quizá nuestra sentencia de muerte: nos escandalizamos cuando dejamos de ganar el dinero que ganábamos, mientras estamos perfectamente familiarizados con el hambre de otras latitudes, con la barbarie cotidiana, con que tanta gente tenga que atravesar océanos para trabajar.

Anonimo ha detto...

La Iglesia de la Virgen del Orgasmo, a punto de inscribirse como culto oficial en Suecia

"El orgasmo es Dios y el orgasmo debe ser adorado". Esta es la 'palabra de Dios' que proclama Carlos Bebeacua, un uruguayo que vive en Suecia y que es el líder de un culto religioso conocido como la "Iglesia de la Virgen del Orgasmo".

Este credo particular de nombre tan extático ha saltado a los medios de comunicación suecos porque está a punto de conseguir ser registrado, en igualdad de condiciones, con el resto de cultos e iglesias del país, según The Local.

Un juez así lo ha decretado, después de que con anterioridad la 'religión del orgasmo' quedara fuera de la egregia lista porque ofendía a los cristianos. Carlos Bebeacua, nacido en Montevideo hace 54 años, se proclama "cardenal" del esta iglesia.

"Dios es orgasmo", explica Bebeacua, que es artista plástico, y decidió iniciar el culto a raíz de una de sus obras, La Virgen del Orgasmo, despertara fuertes protestas en la Expo de Sevilla 92. En esa oportunidad, intervino la policía para evitar disturbios.

La Iglesia del orgasmo cuenta con tres centenares de fieles entre Suecia, España y Latinoamérica, y en su nómina de sacerdotes sólo hay mujeres, que son las encargadas de interpretar el Catecismo del Orgasmo, sus sagradas escrituras. Durante las ceremonias degustan frutas, recitan versos, beben zumos y practican el sexo. Eso sí, aclara Bebeacua, esto último no es lo imprescindible.