29.3.08

Patanegra



Llovía a mares y la calle de las Barcas amenazaba con volver a ser navegable, como en aquel tiempo en que Valentia era Valentia i no Valéncia, ni València, ni Valencia, ni Big Events City.

Las cartas no le habían sido propicias aquella noche y se había quedado compuesto y sin novia. Ni plan B siquiera.

Una luz verde —un verde matizado de furia, agua y tal vez lágrimas— entró desde la Plaza del Ayuntamiento. "Bien —pensó—, tal vez hoy sea mi día de suerte". "Mierda —gritó—". Una joven delgaducha salió de la marquesina del Hotel Reina Victoria y la luz verde se desvaneció. "¡Eh, si es Olivia!".

— Olivia —gritó.

Ella se giró, pero no le reconoció. Él corrió hacia ella. Se abrazaron como lo hacen los amantes que no se ven hace años y saltaron al interior del taxi. "Mierda, sí —pensó—, hoy es mi día de suerte".

Se pusieron al corriente en cuestión de minutos. Nunca habían dedicado mucho tiempo a la prosodia entre polvo y polvo. Ella se levantó el ala del chubasquero y le mostró el muslo.

Joder. Lo cierto es que Olívia estaba irresistible con aquel conejito tatuado. Pensat i fet, la invitó a cenar.

— En el Pata sirven una ensalada de espinacas, pasas, panceta y piñones como para hacerles una reverencia.

¡Olívia dijo Sí!

El taxista lo miró con envidia a través del retrovisor. "¡Que hijoputa, los hay con suerte!".

Y a él se le encogió el corazón. La verdad es que Olívia (¡tramposa!) ya conocía la ensalada de espinacas del Pata. Una apuesta segura.

Patanegra Restorán.
Baró de Sant Petrillo, 3
Benimaclet - Valéncia.
20/30 euros

Impossible sense reserva: 96 389 09 54.

8 commenti:

Vicè ha detto...

Tiene buena pinta la ensalada, sí. Tomo nota. Eso sí, a mi me ha tirado siempre más Jessica Rabbit que Olivia. Estamos sin duda ante dos tramposas de primer orden.
Salute

Anonimo ha detto...

ADORE a Kapuscinski, m´encanta el fragment que posares de Júpiter i eixa ensalada d´espinacs té molt bona pinta!

Anonimo ha detto...

El secreto del Patanegra es una pequeña rajoleta que hay en la terraza. En tiempos fue el local de la penya valencianista de Benimaclet.

La ensalada, de muerte.

bar Torino

Forlati ha detto...

Vicè: discrepància insalvable. Sempre Olivia.

Àgueda: L'ensalada només és l'ham. Patanegra santuari!

Bar Torino: No conec la rajoleta, pero sí el fetiche de la Penya Valencianista de Benimaclet, que Antonio recuperà d'un femer. La PVB no estava allí, o potser m'hagen enganyat, per si deixe d'anar…

Anonimo ha detto...

Es probable que jo estiga equivocat.

bar Torino

Anonimo ha detto...

Siga com siga el pata és un dels pocs llocs que un pot recomanar sense patir pel resultat. A pesar de que, tot prosa yo, les ensalades sempre m'han paregut una mariconada del quinze, jejeje.

diafebusaconstantinoble

Anonimo ha detto...

He quedat per al vermut vespertí en un dels responsables de l'establiment.
Aprofitant tan intempestiva excusa, em persone per a participar esporàdicament del festí que estan vostés pegant-se en absència meua.
Salutacions efussives.

Anonimo ha detto...

Diafebus: mariconades, mariconades. Utilisa un llenguage políticament correcte, home!

Dies porosos: Bon profit pel vermut en el Bar Ramon… ai, com enyore les cerveses barcelonines en la seua companyia, la de la seua senyora i els atres de la tropa…

Forlati.